19/7/09

La cuasi muerte de Nicasio

Las historias de los autos y las mujeres tienen muchas facetas.....
Viajábamos de Zimapán a Ixmiquilpan, luego de comer mojarras a la orilla de la presa cuando nos vimos sorprendidos por una persona que nos pedía bajar la velocidad de esta tranquila y desierta carretera llena de curvas. Unos metros más adelante otra persona más solicitaba nuestra ayuda pues aparentemente había un accidente.
A unos metros abajo del camino, varios hombres intentaban mover una camioneta, pareciera una danza sin coreografía, demasiadas voces y movimientos inútiles.
Mi ahora esposo y yo nos uníamos al grupo para intentar sacar a la persona que decían se encontraba bajo el auto accidentado. Aún no entendemos cómo es que luego de salir del camino sin control, el conductor quedó atrapado boca arriba bajo su propio auto?! ... en fin, el esfuerzo compartido de los que se gritaban unos a otros "compañero", era ayudar al desconocido. (tampoco supimos el por qué de llamarse compañeros, cosa que nos causó mucha gracia ya cuando recordábamos la experiencia).
Al parecer nuestra llegada no fue en vano, pues recuerdo que mi esposo daba indicaciones de cómo levantar el auto con el único e inservible gato hidráulico que tenían a la mano. Mientras tanto yo me arrastre del otro lado de los "compañeros" para intentar conocer la condición del hombre que gritaba desesperado.
Una vez que hice contacto visual lo mantuve hablando, supe entonces que su nombre era Nicasio (no pude ocultar la sonrisa al comentario oportuno de un compañero que repetía "Nicasio? Ni casio que hace"). No estaba gravemente herido, pero si desesperado por salir de ahí, a veces parecía perder la noción y recuerdo que le pedía no dejar de verme y platicarme de sus hijos y su esposa.
Lograron levantar la camioneta y tuvimos que ideárnosla nuevamente con un tapete de auto y un cable para lograr arrastrar a Nicasio fuera de su trampa.
Seguía conversando - o interrogando - a Nicasio, quien me tomaba celoso de la mano y me pedía no dejarlo. Hice mi mayor esfuerzo para revisar su estado, me daba miedo encontrarme con un hueso roto, Nicasio se contorsionaba tratando de ponerse de pie, movido tal vez por la adrenalina y más aún por el alcohol en su sangre (el aliento alcohólico era permanente ). Unos minutos más y llegó la ambulancia para llevárselo al pueblo más cercano.
Curiosa es la relación aquí con las mujeres, pues citando el contexto del escrito que mi esposo hiciera cuando lo sucedido, ayudar esa tarde nos llevó a arrebatarle a Nicasio de las manos a "la otra mujer" ... quien seguro abandonó su objetivo al ver a los "compañeros" trabajando juntos y sin querer en contra de ella.

3 comentarios:

  1. Definitivamente, una mala combinación beber y conducir... NO LO HAGAN!!!

    Landy, me gustó mucho lo descriptivo del accidente de moto, FELICIDADES!!!

    Puedes hablar un poco de la amaxofobia??? creo que sería interesante saber más sobre ese tema...

    Un abrazo...

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  2. Curiosamente es uno de los temas pensados para el blog mi estimado pipope.

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  3. jajaja pipope... me gusta mucho mi sobre nombre... Espero con ansias leer el punto de vista de la compañera sobre esa terrible fobia... Yo conozco una persona con ese mal...

    Saludos Mr. Huevo

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